Los sacramentos
Los sacramentos constituyen el cauce por el que nos llega la vida divina que Jesucristo resucitado le ofrece al mundo a través de la Iglesia. Ninguna otra acción de la Iglesia es tan fecunda y necesaria para la salvación.
Bautismo
Es el sacramento que nos hace hijos de Dios y nos abre las puertas de la salvación. Lo celebramos los últimos sábados de mes
Confirmación
Es el sacramento, por el que recibimos el don del Espíritu Santo, que nos fortalece para vivir en plenitud nuestra condición de cristianos.
Eucaristía
En la Eucaristía recibimos al mismo Cristo y por eso es la fuente y culmen de la vida del cristiano. En ella, el cristiano sacia su sed de Dios.
Confesión
Es el sacramento por el que Jesucristo nos perdona los pecados y nos da la gracia para poder responder a su amor. Es un volver a empezar, porque Dios no nos da por perdidos.
Matrimonio
Por el sacramento del Matrimonio los novios se unen como una sola carne para caminar juntos hacia el cielo, cumpliendo la voluntad de Dios.
Unción de los enfermos
En este sacramento Cristo transmite su fuerza al enfermo para vivir pacientemente su situación. El enfermo es enriquecido con un don especial para identificarse con Cristo en su pasión y crecer en su camino de santidad